miércoles, 31 de marzo de 2010

Noctambula situación (Parte 1)


Escucho a la andina noche,
desprovista de vida,
en la exhalación del humo que me permite seguir
yo consumo lo poco que me da de aliento,
su figura, su retrato, su reflejo, sus ojos,
cristales poco tras lucidos
cubiertos de un misterio agonizante.

Amo toda su construcción de arte,
su cuerpo es la forma arquitectónica perfecta,
el perfume absorbe mi dolor,
besa lo poco que le doy...

De tu alma jamás va a salir
esa voz de mi,
ni cubrirá de heridas tanta belleza
en eso hay algo que no nos cuesta.
Resides en el espacio de mis desvelos;
con la locura de mi fuerza,
encontré un idilio contigo.

De repente me llenas de inspiración
envolviéndome en una nube de seducción,
ojalá y un día yo te pudiera amar un poco más,
después evaporaría en una caucásica ocasión
antes de que me abandones,
desquiciada en el callejón
de la angustia y aflicción,
sé que tu talento no se limitará a una simple construcción,
porque puedes crear en mi abstracción,
he ahí esta nuestra salvación...


parte 2

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